Extracto de “La vía del Tarot” de Jodorowsky, A. & Costa, M. (2006).
Parece tener cierta edad, y se puede dar crédito a su vasta experiencia afectiva. El lado izquierdo de su pecho (a nuestra derecha), el del corazón, es de una anchura excepcional. Es un hombre (o una mujer) de corazón, su copa está abierta, y dispensa generosamente el amor consciente, la alegría de vivir, la serenidad de las emociones dominadas. Es capaz de una gran acción basada en su visión amante del mundo: puede ser un gran terapeuta, un consejero, un médico, un mecenas, un ser bueno y generoso. Si se vuelve negativo, el Rey de Copas verterá su odio sobre su familia y sobre el mundo, podrá ser alcohólico, un perverso narcisista, un hipócrita, un ser enfermizamente celoso, una duplicidad engañosa.